La semana recién pasada Mark Zuckerberg fue invitado a realizar el discurso de la ceremonia de graduación 2017 en Harvard. Además de recibir el título honorario de Doctor en Leyes (a pesar que abandonó dicha universidad en 2005), nos dejó una serie de reflexiones muy valiosas para la gestión de personas.

1. Todos nos movilizamos por un propósito

«Purpose is that sense that we are part of something bigger than ourselves, that we are needed, that we have something better ahead to work for. Purpose is what creates true happiness.»

El fundador de Facebook destaca el valor del propósito como motor de nuestra motivación. «El propósito es el sentido de ser parte de algo más grande que nosotros mismos, de que somos necesarios, de que tenemos algo mejor por delante por lo cual trabajar. Propósito es lo que crea la felicidad verdadera». 

Ante esto resulta clave preguntarse, ¿tenemos un propósito definido en nuestra organización? Y no nos referimos a la visión o la misión, sino que a un gran objetivo transformador que movilice a los equipos. En caso que la respuesta sea positiva, ¿estás haciendo todo lo posible para que el propósito sea conocido por toda la organización? Debes tener en cuenta que las nuevas generaciones no se movilizan por los resultados o por el éxito del accionista, sino más bien por una meta más profunda que les permita conectar su rol personal con el éxito de la organización.

«We can all make time to give someone a hand. Let’s give everyone the freedom to pursue their purpose — not only because it’s the right thing to do, but because when more people can turn their dreams into something great, we’re all better for it.»

Para reforzar este concepto agrega «Todos podemos hacernos el tiempo para darle una mano a alguien. Debemos dar la libertad a todos de seguir su propósito, no porque es lo correcto, sino porque así la gente puede hacer realidad sus sueños y todos nos beneficiaremos de ello».  En nuestras organizaciones debemos brindar oportunidades de desarrollo que le permitan a la gente hacer realidad sus propósitos personales, no solo con un objetivo altruista, sino que con la mira en liberar todo el potencial y creatividad que tienen los talentos de nuestros equipos.

2. Las ideas dan fruto gracias al trabajo duro

«Ideas don’t come out fully formed. They only become clear as you work on them. You just have to get started (…) The idea of a single eureka moment is a dangerous lie. It makes us feel inadequate since we haven’t had ours. It prevents people with seeds of good ideas from getting started»

Zuckerberg cuestiona fuertemente el exitismo de nuestra sociedad en torno a las grandes ideas: «las ideas no vienen formadas completas. Solo se aclaran en la medida en que trabajas en ellas (…) La idea de un momento eureka es una peligrosa mentira, nos hace sentir incómodos al no haberla tenido. Esta ilusión impide que las personas con buenas ideas iniciales comiencen a trabajar en ellas». 

En muchas de nuestras organizaciones no existen canales adecuados para fomentar, apoyar y concretar las buenas ideas. Y a diferencia de los idealizados momentos eureka, las ideas sencillas surgen todo el tiempo. Como responsables de Gestión de Personas, debemos hacernos cargo de generar los espacios para que estas semillas cuenten con el ambiente adecuado para crecer y dar fruto.

«In our society, we often don’t do big things because we’re so afraid of making mistakes (…) The reality is, anything we do will have issues in the future. But that can’t keep us from starting.»

Complementa su visión acerca de las ideas señalando el temor a cometer errores: «en nuestra sociedad no realizamos grandes cosas porque tenemos tanto temor a cometer errores (…) La realidad es que todo lo que hagamos tendrá impacto en el futuro, pero eso no nos puede detener». Ante esto es muy válido preguntarse: ¿En mi organización se castiga el error? ¿Hay margen para apostar por ideas nuevas sin correr riesgos personales?

Te invitamos a reflexionar sobre estos mensajes y compartir tu visión. Las palabras de Mark Zuckerberg podrían ser el fiel reflejo de las nuevas generaciones, por lo que vale la pena cuestionarnos cómo la gestión de personas puede incorporar este punto de vista.

Takeaways: Las nuevas generaciones esperan que las organizaciones donde trabajan les provean un propósito transformador que conecte con sus objetivos personales. Gracias a ello pueden sentir que su trabajo es más que solo una tarea, sino que tiene un significado y un impacto mayor. De la misma forma, esperan que las empresas cuenten con espacios definidos para acoger, respaldar y hacer crecer sus ideas, permitiéndoles contribuir con toda su creatividad y talento de maneras mucho más diversas que su labor diaria.

Basado en artículo original publicado en Fortune.com (en inglés).