Uno de los desafíos más importantes que poseen los líderes en la actualidad es mantener la motivación de sus equipos alineada con la estrategia de la organización. Cuando los objetivos son desafiantes y cada profesional tiene claro cuál es su aporte para conseguirlos, las probabilidades de alcanzar las metas propuestas son considerablemente mayores.

Para realizar este proceso de buena forma, el equipo de Lee Hecht Harrison te entrega algunos consejos acerca de los puntos clave para mantener motivados a los equipos de trabajo.

Claves para mantener un equipo motivado

Desde el primer día de trabajo hay que analizar si las personas que integran un equipo, además de estar listas para el puesto, se sienten atraídas por el rol que van a asumir y si se van a sentir cómodas en la empresa. Un trabajador que no está capacitado para las responsabilidades que va a asumir, se va a sentir desmotivado.

Es muy importante que los colaboradores se sientan parte de la organización, del equipo, pero esto se hace más crítico con los recién llegados. El on-boarding del personal es fundamental para que la comunicación sea fluida y el buen clima se contagie, generando optimismo y ganas de trabajar.

Tanto la compañía como el colaborador necesitan tener claras metas que deben alcanzar. Tal como las empresas se ponen un objetivo de facturación anual que intentan cumplir, cada trabajador debe tener claro sus objetivos personales y de equipo. Esto los animará a superarse y aportar al bien común.

En la actualidad el dinero no siempre es lo más importante, pero sigue siendo la forma más directa de valorar a un trabajador. Debemos evitar crear desequilibrios equipo/renta en puestos similares, valorando debidamente el aporte de cada colaborador.

Premiar los objetivos alcanzados es enriquecedor. Se llama reconocimiento y puede estar asociado a una compensación extra: días libres, regalos, un viaje, etc. Hay muchas formas de motivar y cada trabajador tiene diferentes gustos.

¿Cuáles son los factores que juegan en contra de la motivación?

Tan importante como detectar cuáles son los drivers que generan motivación en los equipos, es tener presente los que generan el efecto contrario. Algunos de ellos son:

  • No contar con las herramientas necesarias para trabajar. Además de las herramientas directas (cuadernos, software, impresoras), podemos indicar también las indirectas, como tener un espacio de descanso cerca de la gente que trabaja en tareas que requieren mucha concentración, etc. Una oficina necesita estar bien acondicionada para hacer el día a día mucho más sencillo.
  • Todos los trabajadores suelen tener como meta personal ascender y mejorar su posición en las organizaciones. Reconocer que la formación continua los ayuda a ser más eficientes es clave para motivarlos. De esta forma comprenden que tienen posibilidades de ascender si llegan a un nivel de conocimiento y práctica adecuado.

Todos estos elementos deben ser debidamente calibrados por el líder, indagando a través del diálogo 1:1, cuál es el estado de avance entre los miembros del equipo y teniendo presente que la motivación es un aspecto que debe ser desarrollado de manera constante y consistente.

Takeaways: De la tradicional teoría de los factores de higiene y los factores de motivación de Frederick Herzberg, podemos extraer varios aprendizajes para reflexionar de forma práctica acerca de la motivación de los equipos. El presente artículo recoge algunas reflexiones de esa teoría y las complementa con consejos prácticos para abordar este tema.