Recientemente envié una captura de pantalla a un colega que se burló del hecho de que finalmente fui calsifiqué por encima de ella en una aplicación que usamos para publicaciones en redes sociales relacionadas con el trabajo. Ella rápidamente respondió que tendría que «ponerse las pilas». Este simple ejemplo muestra el poder de la gamificación en el lugar de trabajo.

Desafortunadamente, muchas personas aún no están familiarizadas con el concepto. Esto puede deberse a que ha sido un tanto lento el proceso de adopción gracias a la opinión dividida entre líderes empresariales y aquellos que creen que el entorno disciplinado tradicional es en última instancia más productivo. Junto con la Inteligencia Artificial (IA) y la Realidad Virtual (VR) / Realidad Aumentada (AR), la gamificación puede tener un cierto «factor de miedo» relacionado con el impacto de las nuevas tecnologías en el futuro empleo y las formas de trabajo.

A pesar del escepticismo anterior, ahora se acepta cada vez más que estas tecnologías mejorarán, no tomarán, nuestros trabajos. Además, la gamificación está madurando en una técnica bien aceptada para aumentar el compromiso. Para aquellos que todavía son nuevos en el concepto, estas son algunas de las razones por las cuales la gamificación pronto será omnipresente en la capacitación y la gestión del rendimiento, y cómo incorporar a la organización.

Implementando la gamificación de forma efectiva

La gamificación no debería dar miedo. De hecho, es muy simple. Es la introducción de varias herramientas, como objetivos virtuales, medidores de progresión, nivelación y puntos, que están diseñados para impulsar el compromiso y el aprendizaje. Al crear tablas de clasificación y desafíos, se empuja a los trabajadores a desempeñarse y se les hace sentir que son parte de la comunidad.

El aprendizaje corporativo es un lugar donde la gamificación es altamente efectiva. La gamificación ayuda a involucrar a los trabajadores que de otro modo podrían estar demasiado ocupados para acceder a los recursos de aprendizaje durante las horas de trabajo y, una vez que han salido de la oficina, simplemente no pueden motivarse. Al introducir mecanismos de recompensa, los alumnos tienen un incentivo adicional para completar los programas de capacitación, que es más tangible e inmediato que el concepto de autodesarrollo. Una vez que están comprometidos, los mecánicos ayudarán a mantener el enfoque al prometer una serie de recompensas cada vez más intermitentes a cambio de la atención exclusiva del alumno.

Uniendo equipos remotos

Para muchas de las mejores empresas y empresas de tecnología del mundo, la gamificación se ha convertido en el pegamento que une a los equipos remotos. La movilidad empresarial significa que el trabajo ahora es algo que las personas pueden hacer en cualquier momento y en cualquier lugar, pero la distancia puede resultar en una falta de compromiso con el aprendizaje. Las empresas necesitan formas de hacer que todos los trabajadores se sientan integrados y comprometidos, y la gamificación aprovecha el impulso competitivo natural de los empleados y el poder de la progresión percibida, para aumentar los niveles de motivación y compromiso en los estudiantes y unir equipos a través del contenido y objetivos comunes.

Un beneficio mutuo para el empleador y el empleado

Los beneficios de la gamificación también se extienden tanto al empleador como al empleado. La metodología de gamificación garantiza la máxima eficiencia de aprendizaje y minimiza los efectos de posibles distracciones al motivar al usuario a permanecer comprometido. Los alumnos con una fuerte motivación para progresar completarán más módulos y ganarán más experiencia, lo que dará como resultado una fuerza laboral más capacitada en menos tiempo y un mayor retorno de la inversión en capacitación.

Un buen ejemplo de esto fue Fallon Health, un cliente de SumTotal que presentó un estudio de caso en un evento reciente de Skillsoft Perspectives que muestra cómo el uso efectivo de la gamificación redujo el tiempo para completar el aprendizaje en un 50 por ciento.

Más importante aún, una vez que los alumnos comienzan a desarrollar competencias por su propia voluntad, asumen la responsabilidad del desarrollo profesional, fomentan el autoempoderamiento e impactan positivamente en cómo se sienten acerca de su trabajo. La gamificación tiene el poder de aumentar la producción de los empleados, mejorar los resultados comerciales y crear una fuerza laboral más feliz y comprometida.

Cómo hacer que la gamificación funcione para tu organización

Introducir la gamificación en un lugar de trabajo es simple, pero requiere el compromiso de toda la organización.

El consentimiento del empleado es un criterio reglamentario vital que debe cumplirse. Los empleados deben reconocer que el juego se está jugando (es decir, prestar atención al juego), comprender las reglas del juego y ver el «juego» como justo.

También se requiere un esquema de recompensa apropiado. Para que los empleados participen en la gamificación, las recompensas proporcionadas deben ser significativas. Descubra qué motivará a sus equipos: ¿son bonos de dinero, recompensas basadas en equipos, recompensas «sorpresa», promociones? Necesita inspirar y dar a cada persona una sensación de esperanza de que puedan tener éxito.

La gamificación también depende de un conjunto claro de reglas. Cualquier confusión sobre las reglas del juego hará que los empleados se retiren. Además, la gerencia debe estar totalmente comprometida con el cambio y estar dispuesta a dedicar el tiempo necesario para administrar el programa.

Takeaways: la gamificación es una excelente manera de mejorar la forma en que aprendemos, cómo nos comunicamos entre equipos y compañeros de trabajo y, en última instancia, qué tan bien nos desempeñamos en el trabajo. Las organizaciones deberían dejar a un lado sus miedos y adoptar este enfoque efectivo y divertido para el desarrollo profesional.

Puedes leer el artículo original en inglés de Tym Lawrence, Director for APAC, SumTotal, a Skillsoft Company