Hace dos años me ofrecieron la plaza de Gerente General. No estaba en mis planes inmediatos, y llegó la oportunidad de tomar las riendas absolutas de un equipo.

Tenía tres semanas antes de iniciar en mi primer día, y claramente me embarqué en mi preparación. Saqué información de un lado y otro, conversé con personas que me dieron buenos consejos, y planifiqué los que serían mis focos y guías en donde pondría mi esfuerzo, al menos en un inicio.

En estas líneas te comparto algunos de los alcances que definí, y lo que realmente sucedió una vez que inicié el camino de liderar personas.

Pensé concentrarme en cuatro temas de fondo. (1) Profesionalizar al equipo, asegurarme que seamos un equipo de alto rendimiento y enfocado en la colaboración. Además de potenciar talento. (2) Ventas y Marketing, involucrarme en el ejercicio comercial, supervisando todo el proceso, y asegurándome que no hubiera riesgo de no vender. (3) Producto. Buscar los espacios de mejora e innovación para tener el mejor producto posible. (4) Control de gestión, en una mirada amplia, kpis de cada área y de negocio.

En estos cuatro ejes, concentraría mi tiempo prioritariamente; era de esperarse que tuviera una agenda muy amplia, por lo que debía tener un plan con focos y control.

Lo que realmente pasó…

  1. Cuentas Claras: Las pymes quiebran por falta de liquidez. La liquidez tiene directa relación no solo con los ingresos, sino con el control de gastos, que a su vez se sostienen sobre su estructura de gastos, consecuencia de un modelo operativo que logre operar la cantidad de clientes que tengas, de manera extremadamente eficiente. En resumen, invertí gran parte de mi energía, en un quinto elemento. Tener máximo control de “las cuentas claras”.
  2. El buscar ser más eficiente nos llevó a cuestionar el modelo operativo y de atención. Teníamos a nuestros clientes altamente satisfechos, pero no éramos rentables en muchos casos.  Cuestionar el modelo operativo tocaba aristas muy transversales, que derivaron en cambios y mejoras en (1) Producto, (2) Arquitectuta TI, (3) Reestructuración organizacional, (4) Cambios de funciones, (5) Intervención de procesos con tecnología, en nuestro caso fue sobretodo software para manejo de procesos internos, (6) otros varios.
  3. Personas. Los problemas no se centraban en falta de colaboración o capacitación, ni mucho menos talento. No fue ahí donde invertimos mayor tiempo y trabajo.  Fue otra variable la que vimos necesario mejorar;  nos hacía falta un lenguaje estratégico común y un framework de trabajo de proyectos y mejoras.
  4. Sobre el ejercicio comercial; fue la diversificación la que tomó toda mi atención. No el pitch de ventas, no las redes sociales, no la publicidad. Sino entender que, al menos en nuestro caso como mediana empresa, había que iniciar una exploración y pilotos en otros mercados, líneas de negocio, y segmentos, es decir, buscar diversificar el negocio.

Los aprendizajes que me quedaron del inicio de este viaje, fueron muchos y diversos, y podría resumirlo en que: hay que estar preparado para lo inesperado, hay que saber que la teoría es muy diferente a la práctica, y el análisis distante de la operación; y que cualquiera sea el desafío o contingencia que te espera, debes tener confianza en ti mismo.