Las cifras de la crisis económica siguen disparadas. Navegamos la peor depresión desde la gran crisis de 1929. El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos ya advirtió que esta va a ser una recesión sin precedentes en la historia de su país.

Una situación que ha puesto en el ojo del huracán a compañías como Avianca, Latam, Airbnb, Uber, WeWork o Hewlett Packard que por la fuerza de los acontecimientos se han visto obligadas a tomar decisiones de recortes de horas de trabajo o de desvinculaciones masivas de empleados. Disney World, ante la crisis ha suspendido a 43.000 empleados y JC Penney en 85.000. Uber, por su parte, anunció hace poco el recorte de una cuarta parte de su fuerza laboral, mientras que la compañía Hewlett Packard, dijo que en un plazo de 3 años despedirá entre 7.000 y 9.000 empleados en todo el mundo.

Ante este panorama, expertos en recursos humanos hacen algunas recomendaciones de cómo enfrentar dentro de las organizaciones semejante apocalipsis. Bernadita Mena, Global Practice Leader para Recursos Humanos de Stanton Chase, experta en talento y organizaciones, asegura que en una crisis como esta se debe abordar al empleado desde un análisis en detalle de todo la vida laboral durante su ciclo en la compañía:

“Uno de los temas centrales en el manejo del talento moderno es tener una mirada desde el employee experience y las interacciones con el empleado durante todo el ciclo de vida laboral -desde el onboarding (ingreso) hasta el offboarding para la generación de compromiso, productividad y retención de talento. Así como las empresas cada día son más estratégicas en la atracción del talento y en generar oportunidades de desarrollo que aumenten el engagement, es importante que su proceso de separación sea tan estratégico como su proceso de incorporación”.

En medio de esta avalancha de despidos y partiendo del principio de que los procesos de desvinculación masiva son dolorosos, tanto para los que se retiran como para los que se quedan: “En esta fase es clave el proceso la evaluación del equipo para entender quiénes son los talentos que cuentan con las competencias que se requieren para la continuidad y sostenibilidad del negocio”.

Un cambio inevitable

Esta crisis de la pandemia, ha evidenciado, los cambios que grandes compañías han tenido que implementar en estos últimos meses. La empresa Airbnb tuvo que desvincular 1.900 empleados de 7.500 (reducirse en un 25%), disponer sus equipos de atracción de talento al servicio de los empleados que salían, para acompañarlos en su estrategia de búsqueda laboral y ofrecer beneficios como la extensión de los seguros de salud para apoyar a sus ex colaboradores.

La situación de esta empresa se volvió un ejemplo de cómo despedir a sus empleados de manera correcta, con empatía y respeto por una carta que el fundador y CEO de Airbnb, Brian Chesky les escribió a sus empleados que se volvió viral.

Uber, por su parte, en medio de la crisis y con el ánimo de apoyar a sus exempleados generó un directorio de perfiles público, para dar visibilidad a los ex colaboradores para compañías que estuvieran en búsqueda.

La diferencia está en los detalles

Los principales consejos de expertos en recursos humanos de buenas prácticas en este proceso de offboarding están dirigidos principalmente a explicar de manera muy clara al empleado las razones del despido y así mismo, darle un adecuado manejo a través de la comunicación interna y externa de la compañía.

Otro aspecto importante para tener en cuenta en este proceso, según los expertos, es el plan de beneficios al empleado que puede incluir el pago del seguro de salud, un sitio alterno para trabajar, la entrega de implementos que le sean útiles para la recolocación como su computador, como herramienta clave para la búsqueda de trabajo.

Así mismo, las empresas en ese proceso de salida se están preocupando por estimular el vínculo de los exempleados a la empresa (invitados a aportar ideas, invitados a eventos) como el caso McKinsey, una compañía que se caracteriza por mantener el sentido de pertenencia de sus ex colaboradores.

En medio de esta crisis mundial, hacer parte de un proceso de offboarding es algo que nadie quisiera hacer ni vivir. Sin duda, otra tarea difícil en estos tiempos de pandemia. Un reto empresarial para que los mejores líderes de las compañías se pongan a camiseta para verle la cara de frente a la crisis haciendo estos procesos de la mejor manera y acompañando al empleado que deja de colaborar. No olvidemos que esto se trata de un momento inédito de consecuencias extraordinarias.

Takeaways: la mirada del employee experience requiere comprender que no solo importa el proceso de entrada a una nueva organización, sino que también el proceso de salida, conocido como offboarding, es fundamental. Hoy más que nunca, las empresas pueden marcar una diferencia acompañando a sus colaboradores aún en los momentos más duros.

Artículo original de Stanton Chase.