Tener una buena relación con tu jefe es importantísimo para un correcto desenvolvimiento del día a día en tu trabajo.

Sin embargo, puede que no sea una tarea sencilla. Las relaciones humanas suelen ser bastante complejas en cualquier forma que se presenten, así que es necesario ser inteligente si tu objetivo es empatizar y mejorar la relación con tu jefe.

No podemos elegir el temperamento de la persona que nos impartirá órdenes diariamente, pero sí podemos manejar las emociones y actuar de una manera que nos permita construir una correcta y satisfactoria relación entre ambas partes.

¿Cómo gestionar o mejorar la relación con tu jefe?

Presta mucha atención a las siguientes recomendaciones. En ellas puede estar la clave para que eleves exponencialmente la cordialidad y el buen trato con tu jefe.

Ponte en su lugar

No analices la situación únicamente desde tu punto de vista. Piensa en cuáles esfuerzos está haciendo para mejorar la armonía del grupo. La mayoría de jefes alcanzan esos puestos antes de estar debidamente preparados y les toca manejar mucha presión.

Observar la situación desde su ángulo te ayudará a darle respuestas más empáticas y, de esta manera, tu jefe podrá darse cuenta de que tu postura facilita la comunicación.

Comunícate

No solo es cuestión de transmitir tus mensajes e ideas, también se trata de que propicies encuentros donde ocurra un intercambio de información.

Hazle saber que mientras más fluidos sean los datos, más fácil será para ti cumplir con sus exigencias.

Cuando tengas algún problema, es fundamental que puedas comunicárselo a tiempo, así estará preparado ante cualquier imprevisto que pueda resultar y no lo tomará por sorpresa. Una buena comunicación es la clave para que surja la confianza en toda relación humana.

Haz quedar bien a tu jefe

Este punto no debes verlo como un tema de adulación. Siempre que tu jefe quede bien parado ante sus superiores será beneficioso para ti. Entonces, si lo ayudas a construir una buena reputación, tu reputación también mejorará y te convertirás en un empleado de confianza.

Conoce a tu jefe a nivel personal

Los jefes también son humanos, y al igual que todo el mundo tienen pasatiempos e intereses que tal vez coincidan con los tuyos. No es indispensable desarrollar una amistad, pero estos puntos de encuentro pueden ser la base para una relación de camarería entre ambos.

Pide y acepta consejos

Esta recomendación puede ayudarte a mejorar tu relación no solo con tu jefe, también con cualquier otro miembro del equipo.

En el entorno laboral es común que estemos rodeados por personas con amplios conocimientos en diversas áreas. Si quieres ganarte la confianza de alguien, una excelente forma de hacerlo es pidiéndole un consejo y mostrándote como alguien respetuoso y admirador de sus conocimientos y competencias.

Muestra respeto por tu jefe

Más allá de que hayas logrado o no construir una buena relación con tu jefe, dice mucho de ti el que sin importar las circunstancias mantengas siempre el respeto hacia su figura de autoridad.

Esto te ayudará en tu meta de ascender y en la construcción de tu imagen dentro de la organización. Además, le demostrarás a tu que por encima de todo eres un profesional y que estás listo para manejar con solvencia cualquier situación.

Mantén tu personalidad

No confundas respeto con adulación. Siempre sé tú mismo y valora y defiende tus gustos, creencias e ideas.

Para construir una relación sana con tu jefe no es necesario que estés de acuerdo con él todo. Un líder valora a aquellos que ponen sobre la mesa ideas contrarias y están dispuestos a defenderlas con argumentos lógicos.

Evita estar en los cotilleos de pasillo

Este tipo de rumores y pláticas dañan más la reputación de quien los difunde que la de los protagonistas.

No participes ni te involucres en este tipo de conversaciones, y menos si están relacionadas con tu jefe. Ante todo, preocúpate por cultivar una imagen profesional.

Resuelve problemas por ti mismo

Más allá de que el feedback es primordial, de ser posible, resuelve situaciones por tu propia cuenta.

De esta manera podrás presentarte ante tu jefe con soluciones y no con nuevos problemas. Estas acciones cultivarán la confianza hacia ti y te posicionarán como un empleado capaz de valerse por sí mismo.

Sé detallista

Y no solo se trata de que puedas resolver problemas sin asesoría, también de que seas capaz de detectarlos a tiempo y de informarlos.

Esto será posible únicamente si te mantienes siempre alerta a todo el entorno, no solo a las tareas que dependen exclusivamente de ti. Los jefes valoran la meticulosidad de sus trabajadores, ya que es un factor que permite elevar la calidad del resultado final.

Takeaways: Para mejorar o gestionar la relación con tu jefe es importante que exista una comunicación fluida entre ambos, donde seas capaz de aportar tus ideas y cuestionamientos aunque no coincidan con las suyas. El respeto es clave para una relación exitosa entre jefe y empleado.