Después de un año en el que las renuncias masivas y las renuncias silenciosas se volvieron tan comunes, creo que dar una nueva mirada a cómo motivar e involucrar a los empleados debe ser una prioridad en la agenda de todos los líderes para 2023.

Comprensiblemente, puede ser difícil saber por dónde empezar. Por eso quiero compartir estas diez estrategias que puedes considerar implementar en tu estilo de liderazgo. Según mi experiencia, ¡pueden marcar la diferencia entre un líder promedio y uno excelente!

  1. Tome la propiedad extrema de sus acciones y errores.
    ¿Cuántos ejecutivos ha notado que culpan a otros sin ofrecer una crítica constructiva? No es raro ver ejecutivos que hacen todo lo posible para parecer que lo tienen todo bajo control; se sienten incómodos con cualquier indicio de debilidad y quieren parecer que tienen el control frente a su organización. Pero si un jugador se derrumba por completo en el campo, ¿quién es más probable que culpe: el jugador o el entrenador que lo puso en esa posición? Los grandes líderes se destacan porque, para ellos, ganar y perder son cosas de “nosotros”.
    ¡En lugar de pasar la culpa, le aconsejo que tome la responsabilidad extrema de todas sus acciones! Al asumir la responsabilidad, establece un ejemplo poderoso para su equipo y genera confianza y confianza, creando una cultura más saludable. Tomar posesión también puede ayudar a otros a ver que todos cometemos errores, y esos errores pueden ser peldaños en la dirección correcta.
  1. Sea un líder transparente.
    Los líderes sobresalientes son transparentes sobre sus fortalezas y debilidades. Eso no implica que tengas piel delgada o que te alejes de situaciones difíciles, pero puedes liderar reconociendo que no siempre tienes la respuesta correcta, la solución perfecta o la experiencia directa. De todos modos, estarás estable en cualquier circunstancia. No puedes inspirar confianza si no eres estable como individuo.
  2. Sea un entrenador, no solo un gerente.
    A la mayoría de las personas se les asignan roles de liderazgo sin la capacitación suficiente, por lo que, naturalmente, terminan actuando como un «gerente» (observando su trabajo, aprobando su tiempo libre, etc.). Para aumentar su liderazgo, piense como un entrenador. Los entrenadores brindan a sus equipos las herramientas y estrategias adecuadas para ayudarlos a resolver problemas y desarrollar carreras.
    Identificar dónde los empleados pueden mejorar y crecer en la empresa. Encuentre en qué son buenas las personas y colóquelas en equipos donde puedan aprovechar sus conjuntos de habilidades. Esto conduce a empleados más felices que hacen contribuciones más impactantes porque sienten pasión por sus esfuerzos. ¿Otro beneficio potencial? Esto también puede ayudarlo a llenar los vacíos en su organización al evaluar lo que la empresa necesita.
  1. Ofrezca retroalimentación constructiva.
    Cuando ocurren errores, es la oportunidad perfecta para asesorar y desarrollar a su equipo. Por ejemplo, puedes preguntar: “¿Qué crees que pasó? Pensémoslo y consideremos nuestras opciones juntos”.
    Encontrar fallas es fácil; el desafío es compartir ideas constructivas que provoquen una conversación saludable para resolver problemas. Adoptar este enfoque puede ayudar a su equipo a sentirse empoderado, incluso si todo no salió a la perfección al principio. Ayude a su equipo a ver que hacerlo mal es una forma poderosa de aprender y mejorar. Independientemente de si resultó perfecto, puede reforzar positivamente a las personas reconociendo sus esfuerzos.
  1. Cultiva la seguridad psicológica en tu cultura.
    Un elemento crucial en cualquier lugar de trabajo es la seguridad. Las personas quieren saber que son seguras para ser innovadoras, asumir riesgos, pensar fuera de la caja y superar los límites. En culturas pobres, los empleados pueden sentir que corren el riesgo de ser despedidos si no hacen todo bien. Incluso pueden hacer lo mínimo para mantenerse a salvo. Deje que las personas se arriesguen y crezcan en sus roles en lugar de mantenerlos encerrados. Empoderar a su equipo de esta manera es una señal maravillosa de un líder seguro que confía en los miembros de su equipo.
  2. Establezca metas alcanzables y celebre los éxitos.
    Breve y dulce: Establezca metas que esté seguro de que su equipo puede alcanzar, luego celebre cuando las alcance. Esto crea confianza en los miembros de su equipo y es un impulsor de energía. Mostrar aprecio en el camino promueve la productividad y ayuda a que su equipo cruce la línea de meta con fuerza.
    Establezca metas realistas para que los empleados sientan una sensación de logro en lugar de sentirse abrumados. Recuerda, no es un sprint; ¡Es un maratón!
  1. Evite una mentalidad de escasez.
    Cuando los gerentes trabajan con una mentalidad de escasez, pueden frenar a quienes les reportan. No desea que el crecimiento se atrofie debido a que los gerentes no empoderan a sus empleados. Contratar personas que reconozcan nuevas ideas y oportunidades para innovar dentro de la empresa. Los empleados con grandes visiones y aspiraciones son imprescindibles para el crecimiento de una empresa.
  2. Adopte una mentalidad de abundancia.
    Celebre el crecimiento, los logros, el avance y la innovación. Contratar personas que aporten nuevas habilidades al equipo; pueden agregar energía al lugar de trabajo e impulsar una cultura donde el potencial es ilimitado. Los líderes notables saben que hay suficientes oportunidades y elogios para todos.
  3. Encuentra resquicios de esperanza.
    Encontrar lo bueno en las personas te cambia a ti y a los demás. Aprenda a buscar el lado positivo y dé a sus empleados el beneficio de la duda en situaciones difíciles. Recuerda, están en tu equipo y tú debes estar de su lado. Trabaje con sus empleados, no contra ellos.
  4. Asegúrese de que la gratitud esté en el centro de su organización.
    Hay un concepto llamado «bucle de gratitud». Cuando alguien expresa aprecio, impacta positivamente a la persona que da las gracias, al receptor de ese “gracias” y a cualquiera que sea testigo de la interacción. La gratitud tiene un efecto de cascada que cambia la naturaleza de las personas. En nuestro panorama actual, la gratitud debe ser constante; debe estar presente cuando sucede algo sorprendente, pero también en respuesta al esfuerzo diario de las personas. Aumentar la gratitud en las organizaciones aumenta la conexión y la seguridad psicológica.

Todos somos humanos, y sentirse visto es muy útil. Centrarse en la gratitud es una manera fácil de hacer que eso suceda para los demás, por lo que creo que es una de las formas más impactantes de aumentar su liderazgo en 2023.

Artículo original de Forbes.