Recientemente llevamos a cabo con nuestra comunidad de Mandomedio una encuesta donde preguntamos a nuestros seguidores, si creen que habrá cambios en su trabajo producto de la cuarta revolución industrial.

Cerca de 1.400 personas respondieron y sobre el 92% cree que habrá cambios en su trabajo. Hasta acá ninguna novedad, sabemos que los desarrollos tecnológicos han cambiado rápidamente la forma de consumir servicios y bienes, y también sabemos que la pandemia ha acelerado la transformación en las empresas y en los consumidores y que muchas de las conductas que vemos hoy, llegaron para quedarse.

¿Entonces qué es lo que creo que no sabemos?, ¿Qué cosas no hemos entendido aún? Para mí el gran desafío que hoy se tiene, es el de la empleabilidad de millones de personas a las que esta revolución está afectando en forma importante y que peligran en el corto y mediano plazo sus trabajos. Y esto que tampoco es novedoso, no está siendo incorporado como un problema urgente por los líderes de las empresas, en el fondo no lo creemos, pensamos que en realidad no ocurrirá.

Lo anterior se puede apreciar porque en la misma encuesta, el 85% de las personas, cree que será capaz de adaptarse a esta situación en su propio trabajo y finalmente no se verán afectadas por estos cambios. El problema es que esto es una esperanza más que una realidad.

Las personas pensamos que es fácil adaptarse, pero es un error, que podemos cambiar sin problemas, pero esto realmente requiere trabajo, esfuerzo y sacrificio, algo que generalmente tratamos de evitar, sobre todo lo último.

Las claves para tener en cuenta

¿Qué hacer entonces? La respuesta es no olvidar que parte importante del liderazgo es formar y desarrollar al equipo y esto supone trabajar diariamente en la empleabilidad de las personas que nos rodean. Hoy no basta con hacer bien nuestro trabajo, también es necesario prepararse para los cambios que están ocurriendo. Hay que hacer y aprender todos los días.

Para lo anterior algunos consejos que pueden ayudar a mejorar la empleabilidad.

  1. Pensar en que habrá cambios y ocuparse en enfrentarlos. Ser tolerante con lo nuevo y mostrar curiosidad por entenderlo antes de descalificarlo.
  2. Conocerse. Para cambiar primero debemos saber en qué, y en segundo lugar si tenemos las capacidades de hacer ese cambio. Quizás parte del cambio es modificar nuestra carrera profesional.
  3. Tener conciencia que el cambio es difícil, el cambio requiere adquirir nuevas conductas o conocimientos o ambas cosas. No se trata de querer, se trata de hacer.
  4. Salirse de nuestro estado de comodidad, ser valientes para enfrentar el desafío de hacer las cosas distintas y aprender a pedir ayuda.
  5. Humildad y automotivación, es probable que el cambio traiga fracasos y errores, lo importante es aprender de ellos y recomenzar. 6.         Finalmente es tener conciencia que somos parte del problema y lo que depende de nosotros solo es nuestra capacidad de adaptarnos con buena actitud y motivación.

Takeaways: Un rol importante del líder es formar y desarrollar a las personas, por lo que en un ambiente de transformación, debe ser capaz de movilizar a su equipo a mejorar su empleabilidad, permitiendo a que las personas se transformen junto con la empresa.