La planificación estratégica es una herramienta fundamental para las operaciones de una organización. Aquí es donde se asientan las bases de los procesos, nutriéndolos con los valores y cultura de la empresa.

Una planificación estratégica de RRHH recoge todo el accionar orientado a los objetivos y funciones de los colaboradores, reflejando la política de la empresa con respecto a todo lo que tiene que ver con el personal.

El departamento de RRHH, al ser el encargo de gestionar el recurso más valioso de la empresa, se ha convertido en un eje fundamental para la transformación y el desarrollo.

Esta planificación estratégica de RRHH cubre todos los elementos que van desde la contratación hasta la formación del colaborador, así que tiene el potencial para conocer de cerca a la persona, entender sus preocupaciones y atender sus necesidades.

Cómo hacer un plan estratégico de RRHH

Por lo general, estas planificaciones son realizadas a principio de cada año, ya que te permite trazar los objetivos en ese periodo.

No es extraño encontrar organizaciones que trabajan sin esta planificación, ignorando su importancia para el desarrollo del capital humano.

En caso de que hayas iniciado el año sin planificación, cualquier momento es idóneo para desarrollarla y aplicarla siguiendo estos tips.

Analiza el entorno de la empresa

Para crear esta planificación es necesario que conozcas la situación actual no solo del mercado, también de la empresa. Analiza los resultados de tu planificación del año anterior y determina cuáles son los aspectos a mejorar.

Una planificación estratégica de RRHH requiere de un análisis de cada uno de los colaboradores, con el fin de conocer sus habilidades y su situación y determinar un plan de acción adecuado para la consecución de los objetivos.

Establece la misión, visión y valores

Independientemente del panorama actual y de cuáles sean los objetivos a perseguir, el plan estratégico debe estar orientado según la misión y visión de la organización.

Los valores que rijan tu cultura deben quedar plenamente identificados en cada una de las acciones a desarrollar.

Afianzar la identidad de tu marca construye el sentido de pertenencia y te permite identificar a los colaboradores que no estén alineados con estos valores.

Conoce tus objetivos

Una planificación estratégica de RRHH reúne tres tipos de objetivos:

  • Explícitos: Son metas muy concretas en materia de manejo del personal, como por ejemplo, retener el talento, mejorar el clima laboral, etc.
  • Implícitos: Tienen que ver con cuestiones más abstractas que surgen en función de los objetivos generales de la organización, como puede ser fortalecer la fidelidad, aumentar la motivación, etc.
  • Largo plazo: Los objetivos a largo plazo son todos aquellos propósitos que se quieren alcanzar durante el periodo de un año que contempla el plan estratégico, abarcando aspectos como el rendimiento, la competitividad, etc.

Análisis FODA

Identifica apropiadamente cuáles son las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de tu capital humano.

Esta información es fundamental para conocer de forma clara cuáles son los retos que atravesarás al aplicar este plan estratégico.

Divide el plan en actividades

Una vez que hayas hecho todo el análisis previo, es hora de empezar a armar tu plan estratégico.

Para esto, debes crear diferentes áreas que quieras abarcar y asignar un equipo de trabajo para cada una de ellas.

Si bien todos estarán trabajando en la misma planificación y todos persiguen los mismos objetivos, esta segmentación ayuda a tener personal enfocado en un área en concreto y a atender cada aspecto de una forma más directa.

Estas pueden ser algunas de esas áreas a considerar:

  • Selección de personal: Es un plan enfocado en la contratación de nuevo personal. El plan debe contemplar un análisis detallado de las actividades de la vacante, para de esta manera encontrar al candidato ideal.
  • Contratación: Un equipo debe encargarse de redactar los contratos y establecer las clausulas y convenios que van a regir la relación entre ambas partes.
  • Formación: Tu planificación estratégica debe contemplar un programa de formación no solo para el nuevo talento, también para los trabajadores antiguos.
  • Prevención de riesgos: Muchas veces estas acciones son desarrolladas por un departamento independiente, pero desde RRHH existe la competencia suficiente para destinar a un equipo las labores de prevención de riesgos.
  • Resolución de conflictos: La finalidad principal de este plan es la de evitar conflictos. Y en caso de que sucedan, contar con las herramientas necesarias para transitarlo de la mejor manera posible.

Poner el plan en marcha el plan y hacer seguimiento

Una vez que hayas armado el plan y designado al personal que ejecutará cada área, ya solo resta ponerlo en marcha.

Al hacerlo, tu organización estará dando un paso importante en la gestión del capital humano, lo cual tiene el potencial de aumentar la satisfacción individual y, de esta manera, alcanzar los objetivos comunes.

El seguimiento también es clave. Abre canales de comunicación donde puedas recoger información de tus colaboradores acerca de qué está funcionando y qué necesita mejorar. Estos datos te ayudarán a crear una mejor planificación estratégica de RRHH el año próximo, y también a corregir sobre la marcha.

Takeaways: La planificación estratégica de recursos humanos debe hacerse de forma anual. En ella se recogen todas las acciones a desarrollar para gestionar el capital humano en ese periodo de tiempo. Para realizar una correcta planificación es necesario analizar el entorno, incluir los valores de la empresa, conocer los objetivos que se buscan y establecer distintas actividades que te ayuden a conseguirlos.