Hacer evaluaciones de desempeño y plantear objetivos relevantes para los trabajadores es una excelente forma de volver a poner foco en temas que necesitan ser mejorados o de recordar cuáles son las tareas claves según las metas y objetivos de la empresa.

Al establecer nuevos objetivos es clave que tanto el evaluador como el evaluado puedan tener una conversación que los ayude a explorar metas relevantes y nuevas formas de seguir mejorando, identificando fortalezas y debilidades. 

¿Por qué es tan importante?

Como comentábamos anteriormente, las evaluaciones de desempeño permiten detectar y hacer seguimiento del progreso de un trabajador por parte de una jefatura, al mismo tiempo que el trabajador recibe feedback que le ayudará a mantenerse en línea con sus objetivos, tanto en su rol como a nivel de la empresa, incrementando su motivación y productividad al sentir que sus esfuerzos son reconocidos. 

Tres puntos que sí o sí debes incluir en una evaluación de desempeño son:

  • Oportunidades de mejora.
  • Acciones/proyectos completados de buena manera.
  • Pasos a seguir.

Las distintas formas de evaluación

Si bien la más tradicional es la evaluación de jefe a trabajador, existen otras metodologías que varían según el tipo de empresa y la cantidad de trabajadores.

1. Evaluación por parte de un supervisor

Realizada por un jefe o superior que conoce al trabajador, su rendimiento y las funciones a realizar. Es importante ser claro y directo.

2. Autoevaluación

El propio trabajador evalúa su nivel de desempeño y propone nuevas formas de mejora.  A través de la autoevaluación, el trabajador puede hacer un análisis en profundidad sobre su comportamiento y los resultados que ha obtenido. Cuando reconoce las áreas en las que puede mejorar, es más fácil fomentar el crecimiento continuo.

3. Evaluación entre compañeros 

Se lleva a cabo entre empleados con el mismo cargo o puesto. Al evaluar el desempeño del grupo, puede hacer ajustes para alinear a los miembros del equipo, mejorar el flujo de trabajo, mejorar las relaciones y la comunicación de los empleados y, por lo tanto, maximizar el logro de las metas.

4. Evaluación 360

 
La evaluación en 360 grados se considera uno de los ejemplos de revisión de desempeño más completos. Esto se debe a que todas las personas involucradas en la rutina de trabajo de un trabajador están invitadas a participar en el proceso. Participan líderes, miembros del equipo e incluso clientes y proveedores. 

Ventajas de realizar evaluaciones 

Las evaluaciones de desempeño traen beneficios tanto a trabajadores como a jefaturas. Algunas de ellas son:

  1. Mejora la productividad
  2. Establece políticas de compensación
  3. Clarifica políticas de ascenso
  4. Detecta errores en la posición
  5. Mitiga agentes externos

Takeaways: Las evaluaciones de desempeño mantendrán a tus trabajadores motivados, sus objetivos y los de las empresa claros, potenciando el trabajo en equipo y cumplimiento de metas.