Durante muchos años los arquitectos han trabajado por sacar el máximo provecho a los lugares de trabajo, sin embargo, las necesidades de los actuales colaboradores están incluyendo nuevos y diversos desafíos a quienes trabajan en diseño de espacios.

En el último tiempo, en el mundo del desarrollo organizacional hemos comenzado a hablar de los espacios de interacción y diálogo permanente, para lo cual, es necesario que no tan solo la actitud sea la correcta, sino que también los espacios incentiven este tipo de prácticas.

A continuación te damos 3 buenas ideas -de fácil implementación- para que tu oficina sea un espacio que estimule el diálogo de forma permanente.

Más escaleras y más ejercicios: Incentiva que los colaboradores usen las escaleras, no tan solo mejorarán su condición física y descongestionarán los ascensores, sino que también se encontrarán con colaboradores de otras áreas. Está demostrado que encuentros casuales estimulan la co-creación y por sobre todo el diálogo. Además, las escaleras son un excelente lugar para campañas sorpresa de comunicaciones internas o endomarketing.

Como en la Universidad: En la universidad nadie tenía cubículos ni mucho menos oficinas, todos trabajamos en espacios comunes como librerías y cafeterías, ahí nacían las buenas ideas. Promueve que los colaboradores estén en espacios públicos, en interacción con otros, muchas veces el trabajo “on the move” puede traer conexiones muy interesantes e inesperadas.

Diseño como una herramienta para generar valor: Muchas veces somos testigos de espacios de trabajo que están pensados en decorar de forma clásica o en coherencia con la imagen corporativa. No, usa el diseño para estimular a los colaboradores a ser más creativos, resultan especialmente interesantes las imágenes con referentes creativos, grandes hitos o cifras relevantes para la organización. Cada decisión de diseño debe estar orientada a estimular a los colaboradores a salir de la caja y desafiar sus propios límites.

Takeaways: Pequeños cambios, pueden hacer importantes mejoras en la productividad de tu equipo de trabajo. Invierte tiempo en implementar un espacio que estimule a los colaboradores a salir de la zona de confort  de un cubículo o una oficina. Muchas veces pequeños cambios pueden generar más dialogo y cooperación inter área.